Análisis de GFI sobre los flujos financieros relacionados con el narcotráfico en Latinoamérica
A finales del año pasado, Global Financial Integrity (GFI), un think tank con sede en Washington, presentó un análisis sobre los flujos financieros ilícitos relacionados con los narcóticos entre Estados Unidos y los principales países productores y de tránsito de narcóticos de México y Colombia. El informe fue encargado por la Comisión de Política de Drogas del Hemisferio Occidental como parte de su mandato de evaluar las políticas y programas de drogas de Estados Unidos en América Latina y el Caribe, evaluar los esfuerzos actuales para reducir el suministro de drogas ilícitas y abordar los daños asociados con el tráfico y el abuso de drogas.
GFI está compuesto por un grupo de expertos que producen análisis de alto calibre sobre los flujos financieros ilícitos, asesora a los gobiernos de los países en desarrollo sobre soluciones políticas efectivas y promueve medidas pragmáticas de transparencia en el sistema financiero internacional como un medio para la seguridad y el desarrollo global.
Se pueden y se han utilizado diversas estrategias para abordar el tráfico de drogas en el hemisferio occidental, desde la erradicación manual y aérea de cultivos hasta la interdicción, la sustitución de cultivos ilícitos y otros enfoques de desarrollo alternativo. Si bien las estrategias existentes han provocado interrupciones temporales del cultivo y tráfico de estupefacientes, no han tenido éxito en abordar estos problemas de manera integral y duradera. Al mismo tiempo, la historia ha demostrado que muchas de estas políticas han tenido consecuencias no deseadas y han causado daños a las personas, sus comunidades y el medio ambiente de manera muy profunda.
Las estrategias financieras del conjunto de herramientas contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo (ALD / CFT) ofrecen una perspectiva diferente para ver y abordar el problema del tráfico de drogas. En este informe, GFI argumenta que la lucha contra el lavado de dinero y financiación del terrorismo no está siendo utilizada en toda su magnitud para luchar contra el narcotráfico, y necesita volver a convertirse en una prioridad. Según GFI responder eficazmente a los desafíos del tráfico de drogas y el crimen organizado transnacional requerirá un esfuerzo multidisciplinario, de múltiples partes interesadas y que incluya ALD / CFT, así como un enfoque más integral de las políticas de drogas que abarque los derechos humanos y la salud pública.
El alcance de los flujos financieros ilícitos relacionados con el narcotráfico
Si bien estimar el valor financiero de las actividades ilícitas es desafiante, GFI llevó a cabo una revisión exhaustiva de los datos disponibles y creó sus propias estimaciones, basándose en una variedad de metodologías, para tener una idea de la escala de este problema. Las diferentes metodologías utilizadas indican que el valor de los flujos financieros ilícitos relacionados con el narcotráfico que afectan a Estados Unidos, México y Colombia se encuentra entre US$42.300 millones y US$121.600 millones anuales. La amplia gama refleja la dificultad de proporcionar un punto de datos cuantitativos para la actividad financiera ilícita. La mejor estimación sería el punto medio de entre US$80.000 y US$90.000 millones al año en flujos financieros ilícitos relacionados con el narcotráfico.
Métodos utilizados para lavar dinero del narcotráfico
Este informe se basa en entrevistas realizadas a expertos familiarizados con los contextos de Estados Unidos, México y Colombia. Se hizo un esfuerzo para incluir una variedad de perspectivas que representen a funcionarios gubernamentales actuales y anteriores, el sector financiero, académicos, investigadores y grupos de la sociedad civil.
A partir de estas entrevistas y otras fuentes disponibles públicamente, este informe identifica el contrabando de efectivo a granel (bulk cash smuggling) y el lavado de dinero basado en el comercio (TBML o Trade-Based Money Laundering) como los dos métodos principales utilizados para transferir los ingresos provenientes de las drogas de una jurisdicción a otra. El contrabando de efectivo a granel implica el transporte físico de grandes cantidades de efectivo, mientras que TBML implica disfrazar los ingresos ilícitos como transacciones comerciales internacionales legítimas para trasladarlos a través de las fronteras y / o lavarlos en la economía formal.
Este informe también analiza el papel de los facilitadores, como inescrupulosos gatekeepers o guardianes que hacen caso omiso a sus responsabilidades profesionales y legales al permitir que el dinero sucio ingrese al sistema financiero internacional. Además, destaca el papel de los funcionarios corruptos, un hilo conductor en el lavado de dinero relacionado con los narcóticos, que facilitan los flujos financieros ilícitos relacionados con los narcóticos y obstaculizan los esfuerzos de las fuerzas de ley.
Recomendaciones de política
Este informe analiza los esfuerzos de México, Colombia y Estados Unidos para abordar los flujos financieros ilícitos relacionados con los narcóticos a través de la prevención, supervisión, denuncia, investigación y enjuiciamiento. Debido a la gran cantidad de grupos ilícitos involucrados y su tremendo ingenio y creatividad, es importante considerar soluciones sistémicas y de gran tamaño a nivel de políticas. Además, ver el tema del tráfico de drogas a través de la lente del delito financiero abre una serie de opciones de políticas, muchas de las cuales están subutilizadas actualmente, señala GFI. Con base en la gravedad de la necesidad, así como en la efectividad y viabilidad de la solución de política, se deben priorizar las siguientes recomendaciones, señalando que si bien los esfuerzos de todos los países son importantes, las estrategias de EE.UU. recibieron más cobertura en este informe, ya que fue preparado para una Comisión del Congreso de los Estados Unidos:
Estados Unidos
Para abordar el papel de las empresas anónimas en los delitos financieros, EE.UU. debería promulgar una legislación que requiera la recopilación de información sobre las personas reales o los “beneficiarios reales” detrás de las corporaciones, LLC (compañías de responsabilidad limitada) y otras entidades similares en el momento del registro.
Dada la prevalencia del TBML y el contrabando de efectivo a granel como formas de lavar el producto de los narcóticos, EE.UU. debería exigir información sobre el beneficiario real para todas las empresas involucradas en el comercio transfronterizo, así como para lanchas rápidas y aviones.
Dado que los inescrupulosos APNDFs, Gatekeepers o guardianes son un hilo conductor en el lavado de dinero relacionado con narcóticos, EE.UU. debería exigir a los abogados, contadores y agentes de formación corporativa que cumplan con los requisitos ALD / CFT, como la debida diligencia del cliente.
Para enfrentar el desafío del TBML, EE.UU. debe fortalecer las Unidades de Transparencia Comercial (TTU), permitiendo el intercambio de información en tiempo real de manera piloto con socios confiables para examinar el impacto en la aplicación.
México
México debería reevaluar cómo el ALD / CFT está funcionando para las empresas no financieras, un sector que actualmente es muy vulnerable, para asegurarse de que el enfoque actual sea efectivo y apropiado.
Dada la superposición entre la corrupción oficial y el narcotráfico en México, Estados Unidos debería estar abierto a las oportunidades de trabajar con México en los esfuerzos anticorrupción.
Si bien México, a diferencia de Estados Unidos, tiene ciertos requisitos de beneficiario final, es importante fortalecer su implementación, especialmente en lo que respecta a la verificación de la información que se reporta.
Debido a que las investigaciones y los procesamientos por delitos financieros siguen siendo bajos, es importante que México fortalezca la coordinación interinstitucional y el flujo de información sobre los casos de ALD entre agencias, desde la presentación de informes hasta la investigación, el enjuiciamiento y la condena.
Colombia
Como en México, las empresas no financieras colombianas son vulnerables; en este sentido, Colombia debe reevaluar cómo funciona ALD / CFT para las empresas no financieras y asegurarse de que el enfoque actual sea eficaz y apropiado.
Colombia debería crear un grupo de trabajo interinstitucional para abordar TBML y aclarar las responsabilidades de las agencias.
Al igual que México, Colombia ha tenido dificultades para lograr condenas por lavado de dinero; en este sentido, es importante realizar una revisión interna exhaustiva para comprender por qué las condenas por cargos de lavado de dinero son tan bajas.
A la luz del papel de las empresas anónimas en el tráfico de drogas y el lavado de dinero, Colombia debe tomar medidas para mejorar la verificación de la información sobre el beneficiario final, particularmente durante la constitución de la empresa.